lunes, 11 de noviembre de 2024

2.2 Identifica los efectos en el crecimiento urbano, las condiciones de vida, la migración y el envejecimiento de la sociedad

 

A. Identificación de factores que impactan a la población rural y urbana.

 Tendencias en la población a consecuencia de las exigencias capitalistas.

 Migración.

Las exigencias capitalistas tienen una gran influencia en las dinámicas poblacionales, tanto a nivel individual como colectivo. Estas presiones están moldeando diversos aspectos de la vida social, económica y cultural. Algunas de las principales tendencias en la población a consecuencia de estas exigencias son:

1. Urbanización acelerada

  • Concentración en las grandes ciudades: El capitalismo, al fomentar el crecimiento de las industrias y los centros de consumo, ha impulsado la migración masiva de áreas rurales hacia las ciudades. Las oportunidades de empleo en sectores como el comercio, los servicios, la tecnología y la manufactura atraen a millones de personas en busca de estabilidad económica.
  • Desigualdad en las ciudades: Las zonas urbanas, aunque con mayor acceso a servicios y empleo, también experimentan altos niveles de desigualdad. Se pueden observar contrastes entre áreas prósperas y barrios marginados, reflejo de un sistema capitalista que beneficia a una élite mientras excluye a sectores de la población.

2. Cambio en la estructura familiar

  • Modelo familiar tradicional en declive: El modelo de familia nuclear ha sido reemplazado en muchos lugares por estructuras más diversas, como familias monoparentales, parejas no casadas, y unidades familiares extendidas. Las exigencias del trabajo capitalista, como los horarios largos y la necesidad de movilidad laboral, han contribuido a una mayor flexibilidad en los modelos de convivencia.
  • Feminización de la pobreza y trabajo no remunerado: Las mujeres, en muchos casos, siguen siendo responsables de gran parte del trabajo doméstico y de cuidado, lo que limita su participación en el mercado laboral. A pesar de los avances en la igualdad de género, la brecha salarial y la sobrecarga de trabajo no remunerado afectan la estructura familiar en muchas partes del mundo.



3. Incremento de la precariedad laboral

  • Empleos temporales y gig economy: Con el capitalismo globalizado, especialmente a través de la economía digital, han proliferado los trabajos temporales, por contrato y en la "gig economy" (trabajos esporádicos y autónomos). Esto afecta la estabilidad laboral de millones de trabajadores, que viven con incertidumbre sobre su futuro económico.
  • Desigualdad salarial: Mientras una parte de la población ve aumentar sus ingresos (especialmente en sectores altamente especializados), la mayoría se enfrenta a salarios bajos, precarización del trabajo, y escasa movilidad social. Esto perpetúa las desigualdades económicas y sociales.


4. Desarrollo del consumismo

Sociedad de consumo: El capitalismo promueve una cultura de consumo donde el valor del individuo está cada vez más asociado a lo que posee. Esto se refleja en el crecimiento de las deudas personales, la dependencia de bienes materiales, y la constante necesidad de consumir para satisfacer deseos impulsados por la publicidad y el marketing.

Cultura de la inmediatez: La presión por estar siempre "conectados" y por consumir productos y servicios rápidamente ha generado un cambio en los patrones de comportamiento. Las personas, sobre todo los más jóvenes, pueden sentir que deben estar en constante movimiento, tanto en términos de adquisición de productos como de empleo.

En un mundo cada vez más acelerado e hiperconectado que premia la inmediatez, la cultura de la urgencia difumina la línea entre lo que es verdaderamente importante y lo que no lo es.

En el trabajo, esto puede implicar atender frecuentes peticiones de última hora, plazos o cargas de trabajo poco realistas y la expectativa de estar localizable incluso fuera del horario laboral.

En la vida personal, las manifestaciones de la cultura de la urgencia incluyen sobreextenderse en las relaciones, comprobar con frecuencia las actualizaciones de las redes sociales por miedo a perderse algo, y responder inmediatamente a llamadas y mensajes de texto, incluso cuando es inoportuno.

Las prisas constantes y la expectativa tácita de estar siempre "activo" en el ámbito profesional y personal pueden crear un estado de alerta exacerbado. Esta hipervigilancia aumenta considerablemente el estrés y la ansiedad, afirma Joel Frank, psicólogo clínico de Los Ángeles (Estados Unidos) y propietario de Duality Psychological Services.

5. Individualismo y estrés psicosocial

  • Competencia y ansiedad: El capitalismo fomenta la competencia individual, lo que puede llevar a un aumento de la ansiedad, el estrés y la soledad. Las personas se sienten presionadas a sobresalir y competir para mantenerse a flote en un mercado laboral cada vez más competitivo.
  • Desapego emocional: La necesidad de maximizar la productividad personal y profesional a menudo lleva a la desconexión emocional, el aislamiento social y la falta de tiempo para el ocio o las relaciones significativas.

El estrés psicosocial se refiere a la presión y tensión que experimentan las personas como resultado de la interacción entre factores sociales, psicológicos y ambientales en su vida cotidiana. Este tipo de estrés no solo implica la reacción emocional y cognitiva ante situaciones percibidas como amenazantes o abrumadoras, sino también la influencia de aspectos sociales como las relaciones interpersonales, las demandas laborales, la situación económica, las expectativas sociales y otros factores externos.

Algunos elementos que pueden contribuir al estrés psicosocial incluyen:

  1. Demandas laborales: Exceso de trabajo, presión por cumplir plazos, conflictos en el lugar de trabajo, falta de control sobre las tareas.
  2. Relaciones interpersonales: Conflictos familiares, problemas de pareja, dificultades en las relaciones con amigos o compañeros.
  3. Factores económicos: Preocupaciones sobre la estabilidad financiera, deuda, desempleo, etc.
  4. Expectativas sociales y culturales: Presiones relacionadas con el cumplimiento de normas o expectativas sociales, como tener éxito, ser productivo o cumplir con roles tradicionales.
  5. Condiciones de vida: Vivir en un entorno social o físico poco seguro, como pobreza, discriminación o violencia.

6. Desigualdades intergeneracionales

  • Jóvenes en la incertidumbre: En muchos países, las generaciones más jóvenes están enfrentando desafíos sin precedentes. La precariedad laboral, el alto costo de la vivienda, y la falta de seguridad social en muchos países les obliga a vivir con una sensación de incertidumbre sobre su futuro. Esto se ve agravado por el alto nivel de endeudamiento estudiantil en algunos lugares.
  • Desafíos para los mayores: Por otro lado, las personas mayores también enfrentan grandes dificultades. El capitalismo global tiende a favorecer el trabajo joven y la flexibilidad, dejando a los mayores en una posición vulnerable, con pensiones insuficientes y poca protección laboral.

7. Migraciones forzadas y desplazamiento

  • Desigualdades globales: Las políticas neoliberales y las crisis económicas en los países periféricos generan flujos migratorios masivos hacia países desarrollados, a menudo con altos costos humanos. Esto genera tensiones sociales, xenofobia y cambios en la estructura demográfica de los países receptores.
  • Trabajo migrante y explotación: En muchos casos, los migrantes enfrentan condiciones laborales precarias y son explotados, tanto por su estatus legal como por la necesidad de trabajar en sectores de baja remuneración.

8. Cambios demográficos y envejecimiento de la población

  • Envejecimiento poblacional: En muchos países desarrollados, el capitalismo ha favorecido sistemas laborales que no son inclusivos para los trabajadores mayores. Esto ha llevado a una disminución de la tasa de natalidad, mientras que la esperanza de vida se incrementa, lo que genera un envejecimiento acelerado de la población.
  • Falta de políticas sociales efectivas: Muchos sistemas de seguridad social y pensiones no están diseñados para afrontar estos cambios, lo que podría generar una crisis económica y social en el futuro si no se implementan políticas públicas adecuadas.

9. Impactos ecológicos y sostenibilidad

  • Destrucción ambiental: El modelo capitalista ha impulsado un crecimiento económico basado en la explotación de recursos naturales sin tener en cuenta sus consecuencias ecológicas. Esto ha llevado a un aumento de la contaminación, la pérdida de biodiversidad y el cambio climático, lo que afecta a las poblaciones más vulnerables, especialmente las más empobrecidas.
  • Cambio en las dinámicas de consumo: Las personas están empezando a replantearse los valores de consumo masivo, con un aumento de los movimientos pro-sostenibilidad y la demanda de productos éticos. Sin embargo, este cambio aún es limitado y a menudo está condicionado por la capacidad económica de los consumidores.

10. Globalización y fragmentación cultural

  • Hibridación cultural: La globalización, impulsada por el capitalismo, ha creado una mezcla de culturas, tradiciones y lenguas. Sin embargo, esto también ha causado la homogeneización cultural en muchas áreas, donde las culturas locales quedan opacadas por el predominio de la cultura de consumo global.
  • Pérdida de identidad colectiva: El capitalismo promueve el individualismo, lo que puede debilitar la identidad colectiva y los lazos sociales. En este contexto, se ve un debilitamiento de los movimientos sociales de izquierda y una mayor polarización política.

En resumen, las exigencias capitalistas están llevando a la población a enfrentar situaciones de creciente incertidumbre económica, desigualdad, precariedad laboral y transformaciones culturales. Aunque hay un creciente interés por modelos económicos alternativos que prioricen el bienestar social y la sostenibilidad ambiental, el capitalismo sigue siendo un sistema dominante que estructura y limita las posibilidades de cambio en muchas sociedades.